El Parlamento Europeo ha decidido acelerar la eliminación progresiva de los gases fluorados de efecto invernadero (gases F) y alcanzar su eliminación total para 2050. Esta posición equivale a una prohibición de los aparatos que contienen gases F, en algunos casos ya en 2026.
El 30 de marzo de 2023, los miembros del Parlamento Europeo (MEP) adoptaron su posición sobre la revisión del marco legislativo de la Unión Europea (UE) sobre las emisiones de gases fluorados con 426 votos a favor, 109 en contra y 52 abstenciones.
El objetivo es contribuir al objetivo de neutralidad climática de la UE. Los eurodiputados desean lograr una reducción gradual más drástica de los hidrofluorocarbonos (HFC) en el mercado de la UE a partir de 2039, con la eliminación total de la producción y el consumo de HFC para 2050. Este objetivo armonizaría las normas actualizadas con el objetivo de neutralidad climática de la UE para 2050.
Los objetivos generales de la postura de los eurodiputados son impulsar soluciones alternativas y combatir las actividades ilegales. Para estimular la adopción de soluciones respetuosas con el medio ambiente y brindar seguridad a consumidores e inversores, los eurodiputados quieren reforzar los requisitos que rigen la comercialización en el mercado único de la UE de productos que contienen gases fluorados. También quieren que se mejore la vigilancia del comercio ilegal de gases fluorados, permitiendo a las autoridades aduaneras incautar y confiscar los gases fluorados importados o exportados que infrinjan la normativa, de acuerdo con la próxima directiva sobre delitos ambientales.
El 5 de abril, el Consejo Europeo anunció que los Estados miembros acordaron un mandato para que la presidencia iniciara las negociaciones con el Parlamento Europeo sobre las dos propuestas de la Comisión Europea. El mandato de negociación acordado por los Estados miembros modifica, entre otras cosas, el calendario de reducción gradual de la propuesta. Tomando como ejemplo las bombas de calor, el Consejo Europeo acordó posponer varias prohibiciones respecto a la propuesta de la Comisión Europea, para alinearla mejor con los objetivos establecidos en REPowerEU, y propuso dividir la prohibición de ciertas bombas de calor de tipo split en una prohibición anterior para los sistemas de bomba de calor aire-agua (ATW), para los cuales existen alternativas más disponibles, y una prohibición posterior para los sistemas de bomba de calor aire-aire (ATA), en los cuales es más difícil aplicar alternativas. Para compensar esto, se introducen más cuotas para la comercialización de HFC. Además, el Consejo añadió una cláusula de seguridad para permitir a la Comisión reaccionar, mediante actos delegados, para liberar un número limitado de cuotas adicionales si las prohibiciones propuestas pusieran en peligro la consecución del objetivo de despliegue de bombas de calor requerido por REPowerEU.
Tras este anuncio, una alianza de 10 asociaciones europeas líderes y socios globales respondió el 6 de abril. La alianza está formada por Home Appliance Europe (APPLiA), Air conditioning and Refrigeration European Association (AREA), la Association of European Refrigeration Component Manufacturers (ASERCOM), el European Fluorocarbons Technical Committee (EFCTC), European Heat Pump Association (EHPA), la European Partnership for Energy and the Environment (EPEE), la European Phenolic Foam Association (EPFA), Japan Business Council in Europe (JBCE), la Japan Refrigeration and Air Conditioning Industry Association (JRAIA) y PU Europe.
La alianza comentó que, si bien se posponen algunas prohibiciones del mercado, persiste su preocupación por la falta de granularidad. Las prohibiciones deben contemplar las diversas aplicaciones, en particular los edificios multifamiliares e industriales, y los entornos en los que se instalan los equipos. Estos sistemas no son universales y la falta de precisión conllevará, en el mejor de los casos, complicaciones en la implementación de la normativa y, en el peor, graves riesgos de seguridad. Es fundamental que se conceda tiempo para garantizar la capacitación y certificación generalizada de técnicos a fin de evitar accidentes relacionados con sistemas con refrigerantes alternativos, y que se realicen inspecciones periódicas y controles de fugas para garantizar un funcionamiento seguro y energéticamente eficiente. En cuanto a las reducciones graduales, persiste el riesgo de escasez de refrigerante, ya que no se ha añadido suficiente cuota para justificar el aplazamiento de algunas prohibiciones de equipos. La cláusula de seguridad para la implementación de bombas de calor es bien conocida, pero el proceso de liberación de cantidades adicionales y la inclusión de un valor máximo aún causa serias complicaciones en la cadena de suministro y la planificación empresarial para la industria, y la implementación de dicha cláusula tardará demasiado en reaccionar ante la escasez del mercado.
La alianza ha reiterado su apoyo a la reducción gradual de los HFC con mayor potencial de calentamiento global (PCG) y al apoyo a nuevas tecnologías, y ya utiliza opciones alternativas fluoradas y no fluoradas. Con antelación al Comité de Representantes Permanentes de los Gobiernos de los Estados Miembros ante la Unión Europea (COREPER) I, la alianza expresó su preocupación por la propuesta del Parlamento Europeo, considerando varias disposiciones que podrían poner en peligro los objetivos de REPowerEU sobre el despliegue de bombas de calor y ralentizar la transición energética.
Como siguiente paso, el Consejo Europeo, el Parlamento Europeo y la Comisión Europea iniciarán las llamadas negociaciones tripartitas para alcanzar un acuerdo sobre la forma final de la normativa. La alianza instó a los negociadores a:
· Hacerlo bien: incluir cuotas suficientes, con prohibiciones alcanzables, claras y granulares, y con plazos razonables;
· Sea preciso: utilice definiciones claras para los productos prohibidos, lo cual es una medida extremadamente prescriptiva desde el punto de vista tecnológico que no puede funcionar sin claridad;
· Hacerlo pragmático: adaptar las leyes a las realidades del mercado en cuanto a tiempos de desarrollo de productos, necesidades de servicio, preocupaciones de seguridad y una fuerza laboral calificada; y
· Hacerlo consistente: no crear una obsolescencia programada de los equipos existentes que afecte a todos los sectores.
La tecnología avanza constantemente, y es evidente que los productos actuales son mucho más avanzados que los del pasado. Por lo tanto, es comprensible pensar que la tecnología no puede avanzar mucho más. De hecho, la tecnología seguirá avanzando, pero es necesario avanzar con paso firme y sin prisas. Además, la capacidad de producir en masa productos de alta calidad, así como su correcta instalación y mantenimiento, es vital. La industria debe fabricar productos que las personas puedan instalar cerca de donde duermen sus bebés sin preocuparse por la seguridad. Es necesario atender las expectativas del consumidor.
Fecha de publicación: 10 de mayo de 2023
